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Secreta Mentira

by Ortega Gryselda

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Secreta
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Mentira
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Gryselda I. Ortega
Para una mejor experiencia, se recomienda oír cada uno de los audios insertados a lo largo de la lectura; sin embargo, en caso de no desearlo, no será necesario.
Para una mejor experiencia, se recomienda oír cada uno de los audios insertados a lo largo de la lectura; sin embargo, en caso de no desearlo, no será necesario.
Melodía
Sentir como las ondas sonoras del violín son parte de ti, como si fueran olas que fluyen en tu interior y bailas al compás de ellas, como si te impulsara a seguirlas a donde sea que te lleven. Cuando comienza, no es posible escapar de ese sentimiento, y solo te dejas llevar por él, dejas que fluya por tu anatomía. Te mueves con las olas; giras, subes, bajas y vuelves a subir. Tu cuerpo es como agua fluyendo de un manantial, te expones, tanto como si estuvieras desnuda al mundo. Todos pueden sentirlo, pueden verte fluir y moverte, expuestos a ese sentimiento, a la sensibilidad de tus movimientos, al expresar de tus emociones, todos los pueden sentir.
Kitri´s Grand Jeté (1) y los aplausos retumban en cada rincón del gran teatro, y miles de ovaciones se oyen a viva voz. Pero, hay algo que me inquieta, son esos ojos clavados en mí, desorientados y fríos.
Durante los Seven Double and one Triple Fouettés en Tournant (2), fijo mi eje sobre aquella mirada que expresaba tanto y nada a la vez. Tan desesperados en el fondo, pero por la superficie expresando nerviosismo y frialdad, escondiendo aquella verdadera realidad oculta en su interior.
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-Disculpe que la interrumpa señorita, pero, ¿podría repetirme cuál es su especialización? – Dijo aquel agente policial, que me había estado escuchando hace tan solo unos minutos.

-Psicología, soy psicóloga además de bailarina- Dije sin más.

-Claro, y, ¿podría detallar la ubicación del sujeto en el teatro? -

-Él no estaba sentado en las butacas, como los demás, permanecía apoyado contra una de las paredes del fondo, de brazos cruzados, con esa expresión lejana- Detallé.

-Por favor, explique qué es lo que pudo ver del sujeto que la puso alerta-.

-Su mirada, como si estuviera perdido, físicamente allí, pero su mente en otra parte. Metido en su subconsciente, ajeno a todo su alrededor, siendo indiferente. Su cuerpo, la forma en la que movía su pierna derecha con nerviosismo, sin siquiera desviar la vista del escenario, de mí. Sus manos permanecían todo el tiempo dentro de los bolsillos del pantalón de vestir beige que llevaba; sin embargo, notaba el movimiento de las mismas dentro de ellos. Todo en él estaba descolocado del contexto. Más con lo que sucedió luego-Dije con la vista fija en aquella mesa que yacía frente a mí.
Referencias:
1_ paso de ballet, donde el bailarín realiza un gran salto antes de la apertura de piernas.
2_ paso de ballet, donde la pierna de giro se estira y genera un Fouettés, es decir un giro batido, a gran velocidad y fuerza.
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-Disculpe que la interrumpa señorita, pero, ¿podría repetirme cuál es su especialización? – Dijo aquel agente policial, que me había estado escuchando hace tan solo unos minutos.

-Psicología, soy psicóloga además de bailarina- Dije sin más.

-Claro, y, ¿podría detallar la ubicación del sujeto en el teatro? -

-Él no estaba sentado en las butacas, como los demás, permanecía apoyado contra una de las paredes del fondo, de brazos cruzados, con esa expresión lejana- Detallé.

-Por favor, explique qué es lo que pudo ver del sujeto que la puso alerta-.

-Su mirada, como si estuviera perdido, físicamente allí, pero su mente en otra parte. Metido en su subconsciente, ajeno a todo su alrededor, siendo indiferente. Su cuerpo, la forma en la que movía su pierna derecha con nerviosismo, sin siquiera desviar la vista del escenario, de mí. Sus manos permanecían todo el tiempo dentro de los bolsillos del pantalón de vestir beige que llevaba; sin embargo, notaba el movimiento de las mismas dentro de ellos. Todo en él estaba descolocado del contexto. Más con lo que sucedió luego-Dije con la vista fija en aquella mesa que yacía frente a mí.
-Continúe- dijo el agente, sin despegar la vista de mí y oyendo atentamente cada palabra salida de mi boca.

Aplausos
-Comprendo. ¿Qué sucedió luego? -preguntó, intentando lo que supongo era armar la escena en su mente.
-Mi puerta del camerino estaba sin llave, y siempre la cierro cuando debo salir, pero creí que quizás lo había olvidado ese día- dije con una presión surgiendo en mi pecho-.
-Hice la ultima pirueta que marcaba la coreografía, para luego terminar en el suelo sentada y abrazándome, finalizando la presentación, y le eché una ultima mirada al sujeto y su expresión había cambiado. Ya no estaba perdido ni desconcertado, o nervioso. En sus ojos había destellos de maldad, peligro, de amenaza. Estaba más cerca al escenario, con una postura que emanaba seguridad e intimidación. Totalmente distinto a lo que aparentó al principio. Luego, me levanté del suelo helado para hacer la reverencia final y comenzar a caminar hacia mi camerino-.
-Al entrar, se cierra la puerta con demasía y me toman por el cuello. Logré gritar un poco, lo que alertó a las personas de seguridad, que comenzaron a forcejear la puerta-.
-Mientras estuvo caminando hacia allí ¿notó algún movimiento extraño o algo fuera de lugar? – preguntó el policía atento para escribir cada detalle en su libreta.
- ¿Le dijo algo en ese momento? ¿Porqué lo hacía o algún indicio de los hechos? –
Personas corriendo
 <Muchos hombres de seguridad corrían de un lado a otro, repitiendo que alguien logró meterse detrás del escenario y que podría ser una amenaza para alguno de los artistas> -No, todo estaba como siempre- dije, evitando mis pensamientos.
-Nada, solo se limitó a apretar cada vez con más fuerza mi cuello, hasta que me sentía asfixiada- mis ojos se cristalizaron y veía borroso- Solo deseaba salir de allí cuanto antes, creí que moriría en ese instante. Me estaban arrebatando la vida sin siquiera saber la razón. Me sentía perdida, desorientada, no sabía como actuar, qué hacer para salvarme- las lágrimas comenzaron a salir sin que las pudiera retener.
-Cálmese señorita- dijo entregándome un pañuelo - Está aquí ahora, y está a salvo. Cálmese, se lo pido- dijo el policía ya cansado, ya que hace horas está interrogando a diversos sospechosos del caso.
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