OBJETOS MACHADIANOS EN BAEZA

Ya en los campos de Jaén
amanece. Corre el tren
por los brillantes rieles,
devorando matorrales,
alcaceles,
terraplenes, pedregales,
olivares, caseríos,
praderas y cardizales,
montes y valles sombríos.

Otro Viaje

Tras la turbia ventanilla,
pasa la devanadera
del campo de primavera.
La luz en el techo brilla
de mi vagón de tercera.
Entre nubarrones blancos,
oro y grana,
la niebla de la mañana
huyendo por los barrancos.

Entre los años 1912 y 1919 Antonio Machado fue docente en la rama de francés en el Instituto General y Técnico, hoy IES Santísima Trinidad de Baeza.

Lo que más me sorprende de Machado son sus romances algo peculiares, primero se enamora de una joven a la que le dobla la edad con la que más tarde se casa, y luego conoce a una mujer casada, con la que no pudo tener nada y pasó a ser su amor platónico. Su gran capacidad de expresar sus sentimientos a través de la poesía, como se desenvuelve con ella y la manera en que la transmite.
A pesar de haber tenido mala suerte, supo seguir adelante con sus poemas, que a día de hoy se siguen recordando.

"Allá, en las tierras altas..."
Allá, en las tierras altas,
por donde traza el Duero
su curva de ballesta
en torno a Soria, entre plomizos cerros
y manchas de raídos encinares,
mi corazón está vagando, en sueños...
¿No ves, Leonor, los álamos del río
con sus ramajes yertos?
Mira el Moncayo azul y blanco; dame
tu mano y paseemos.
Por estos campos de la tierra mía,
bordados de olivares polvorientos,
voy caminando solo,
triste cansado, pensativo y viejo.