Mi Constitución

Romina Aldunate, Josefa Aravena, Fernando Espinosa, Valentina Molina y Catalina Sepúlveda

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Además yo no quería que fueran las votaciones en ese momento porque a principios de abril estaba la embarra' con el covid en Chile, mucho más en la región del Maule que estaba muy perjudicada. Pero igual esto hizo que los candidates tuviéramos otro temor más.

Para nosotros fue un miedo porque se podía meter una mano tránsfuga en las votaciones. Como que te quitaba un peso de encima el saber que iban a ser el 15 y 16 de mayo, pero luego te dicen todo lo que incorpora el cambio de fecha, y tú te enojai po'. Esto dio paso a tener malos ratos, disputas, temer al futuro; por lo menos así lo viví yo.

Los días antes de las elecciones yo estaba súper tranquilo, en ningún momento me descompensé o algo, la verdad es que hicimos mucha pega, entonces cuando íbamos llegando a la fecha yo sentí como "ay al fin, al fin vamos a parar un poco, descansar cinco minutos".

Mi vida siempre se ha visto como un problema, tanto por mi historia familiar, como por mi identidad. Lucho día a día contra una sociedad a la que le cuesta reconocer que me llamo

Mi nombre lo saqué de un libro de historia hebrea, ahí se le daba el significado de hombre salvaje. Me sentí identificado porque para mí el día a día era un constante sobrevivir más que vivir.

Me di cuenta que algo estaba mal conmigo cuando tenía entre 11 y 12 años, porque sentía que algo no tenía sentido. Antes de eso, los niños y niñas compartíamos como iguales en el liceo, pero cuando empezaron a llegar los cambios hormonales y la pubertad, el tema de quién era empezó a ser importante.

Desde chico me pregunté por qué no había nacido como niño. Miraba cómo a las niñas bonitas les gustaban los hombres, y yo quería convertirme en uno de ellos.

Cuando supe que me iba a llegar la regla y que mi cuerpo se iba a empezar a desarrollar, dejé de ir al colegio. Fue tanto que llegué a repetir de curso, pero nadie entendía por qué me comportaba así. La única solución que encontré fue vendarme el busto a medida que me empezaba a crecer.

Mi papá biológico fue mi último tutor. Él no sabía ser papá porque no lo veíamos de cabro chico. Nos costó encajar con mi hermana en su casa porque él nos ponía reglas y nosotros nos mandábamos solos desde pendejos. Eso no le gustaba. Además, nunca nos llevamos bien con su pareja. Era agresiva y violenta, nos intentó pegar muchas veces y nos echaba de la casa. Ella cagó todo.

No lo muestro porque esta es mi historia, pero sí les puedo decir que desde los 13 años empecé a tener contacto con él. Nos compraba comida y nos mandaba plata, pero mi mamá se la gastaba en el casino o en drogas.

Terminé viviendo solo con mi hermana, y alejado del daño que nos producía nuestra historia familiar. Por las experiencias que me ha tocado vivir, he visto y experimentado desde un punto muy cercano que el sistema está lleno de errores, los que hay que corregir antes de que más personas sufran por la manera en que todo está establecido.

Estuve en varios establecimientos educacionales y partí en séptimo básico con el tema del activismo. En ese momento estudiaba en el Liceo Santa Teresita de Talca y desde ahí hasta primero medio fui presidente de curso. Mis compañeros me incentivaron mucho en este proceso. Por problemas personales me tuve que cambiar al Liceo de Cultura y Difusión Artística de Talca, establecimiento en el cual tuve un cargo en el centro de alumnos en segundo medio. Ahí comenzó mi vida más política.

Desde ahí no paré más, siempre estuve presente en organizaciones estudiantiles, de la comunidad LGBTIQ+ y del Colegio de Profesores, como la del movimiento obrero. Desde chico he conocido las falencias políticas que hay en el país. La sed de cambio y de justicia siempre ha tenido un espacio en mí. Ya en tercero y cuarto medio fui Presidente del Centro de Alumnos del Liceo.

En esos tiempos, como estábamos en fase 1 de la cuarentena, todos los trámites los tenía que hacer por medio del Call Center de Servel. Ahí se me informó de que si yo había hecho los papeles en el Registro Civil, estos también llegaban a Servel, así que quedó la constancia de que yo había avisado sobre el cambio de nombre.

Me dijeron "no podemos hacer nada a menos que usted hable con el director de parte regional",  pero se demoró un día entero en responderme y fue su secretaria la que se comunicó conmigo.

Ella me dijo que yo había hecho los patrocinios como Catalina Tello, lo que es verdad porque no habían pasado los dos meses, y que no podían hacer nada porque las papeletas ya estaban impresas. Fue por esto que decidí hacer una denuncia pública al Servel.

Igual de repente me pasaba que miraba en el sistema y aún salía Catalina Tello, pero yo la verdad lo pasaba por alto porque tenía la seguridad de que al momento de las elecciones, o sea que igual faltaba bastante tiempo, iba a salir Zev Tello en la papeleta.

Crecí en una familia disfuncional, donde desde chico tuve una realidad muy dura, algo por lo que ningún niñe merece pasar. Mi mamá era alcohólica y diagnosticada con esquizofrenia, lo que hizo que con el paso de los años se hiciera imposible vivir con ella.

Soy un cabro nacido y criado en el Maule. Mis papás me llamaron Catalina Tello en cuanto nací. Nombre que durante gran parte de mi vida ha sido un problema, al igual que lo fue el entorno en el que viví.

Ahí fue cuando se le informó al Sename lo que estaba pasando. El colegio tenía antecedentes de que no teníamos comida en la casa, ni luz, ni agua; yo siempre llegaba moreteado, ese día llegué con la cara rajada, mi hermana igual. El Sename se apropió un poco de la situación y nos empezó a realizar esa especie de tratamiento que se le hace a las personas para ver qué tan complicada es su situación, y si nos llevaban al recluso que está camino a San Clemente o no.

Tuve que decirle a la gente que me buscara en la papeleta como Catalina Tello, lo cual para mí fue denigrarme como persona y a mi identidad. Para una persona transgénero, que expongan un nombre que ya no te pertenece da paso nuevamente a los problemas de disforia y a tener conflictos de identidad porque la gente no entiende por qué hay dos nombres. Todo eso genera que se retroceda emocionalmente a algo que uno ya había superado.

Aquí claramente hay una diferencia de poder del Estado contra mí, y posiblemente ellos ganen. Se lavaron mucho las manos diciendo que no era discriminación contra mí, sino que era un problema del sistema, pero muchas personas que eran votantes me dijeron que también habían informado su cambio de nombre y tampoco se los habían respetado. Esto evidencia que no es un problema del sistema, es discriminación que se refleja en momentos como las elecciones.

Aún estoy viendo el tema de la denuncia pública porque, si bien yo soy estudiante, no tengo el sustento económico como para costear un abogado que me vaya asesorando, entonces toda la denuncia la estoy creando con la ayuda de compañeros de la lista que son abogados.

Encuentro que ahí igual los que pudimos liderar, yo como presidente y el vice, tuvimos mucho apoyo. Fue el mismo vicepresidente, Pedro Muñoz,&nbsp;un compañero que siempre voy a tener en el corazón, el que me incitó a postularme como constituyente. Recuerdo que me dijo: “weon metete a constituyente, tu cachai que cualquiera ahora se puede meter, metete, metámonos”.

Habían 50 estudiantes encerrados en el liceo todos lo días. No teníamos plata para comprar nada, pero hacíamos pan ahí mismo. 

Ahí me toco vivir el estallido social en el 2019. Después de eso fue bacán porque ganamos mucha fuerza como activistas y quedamos con un puesto relevante como Estudiantes Organizados de Talca. Fui líder las intervenciones artísticas de las marchas, además de convocarlas y organizarlas junto a otras organizaciones como 'Talca Resiste' o 'Talca en la Calle'.

Fue terrible igual, porque nos cagamos de frío y el liceo estaba lleno de murciélagos. Los pacos se intentaban meter todo el rato, uno trató de entrar con chaleco anti balas pero pusimos resistencia. Ahí pude comprobar que soy capaz de manejar bien una situación compleja. Fue brígido porque la prensa estuvo ahí todo el rato, tuvimos que ir hablando con el alcalde y fuimos aspirando a un par de cosas con las negociaciones. Ahí me di cuenta por primera vez en mi vida que le podíamos ganar a este sistema.

Después de eso, a principios del 2020, viví un hecho que cambió mi vida: La toma del Liceo por malversación de fondos. Hace 5 años la DAE se robó 35 palos y yo dije: "Nos vamos a tomar el liceo y no lo vamos a soltar hasta que arreglen esta cagá. Me importa un pico".

Desde entonces, empecé a ir todos los días al centro del Sename para ver a un psicólogo y a una asistente social. Dentro de ese proceso conocí a uno de los abogados que trabajaba ahí, uno joven que podía entender más mi situación, por lo que con su ayuda busqué un tutor legal, para así no tener que vivir en San Clemente con les demás niñes.

Ahí fue cuando empecé a tener más comunicación con mi papá, ya que el Sename me advirtió que tenía unos días para hallar un tutor legal. Si no encontraba a alguien, tendría que irme con ellos.

Mientras yo buscaba un tutor, la institución tramitó los documentos necesarios, pero nunca enviaron a un asistente social para que viera la situación en mi casa. Fue solo cuando mi mamá cayó presa que el Sename realmente quiso tomar cartas en el asunto.

La relación con mi papá no es cercana. Cuando tenía 5 años, mi mamá nos raptó y nos llevó para Santiago, entonces lo dejé de ver. No me acordaba ni de su cara, para mi era un extraño. La separación de ellos fue tóxica y nos dañó mucho a mí y a mi hermana. El Poder Judicial decretó que mi mamá se tenía que hacer cargo de nosotros.

Por eso La Lista del Pueblo sigue trabajando post proceso constituyente, yo sigo saliendo a terreno cuando es posible. Estamos haciendo órganos externos para que las personas de la lista puedan implementar un sistema de democracia directa, para eso hay que crear los espacios, crear las sedes, etc. 

Creo que la pega de la juventud es politizar la calle y no solamente eso, organizarla y movilizarla. Planeo tanto seguir en esto que para mí ya es un estilo de vida.

Mi Chile ideal tendría, entre muchas otras cosas, mayor integridad a la identidad, y no solo me refiero a la disidencia sexual, sino que de identidad como personas, como lo que yo decido hacer y las oportunidades que poseo, porque seguimos viviendo en un país en donde el que tiene plata lo puede hacer y el que no, cagaste.

Planeo seguir en este camino porque creo que es un proceso constante, no es solo estar en instancias tan complejas como estas. Yo creo que la política corriente se está perdiendo. Nosotros seguimos pensando que lo que pasa en el Congreso, es la única diplomacia existente cuando realmente todo es política, y esta es tan significativa para nosotros como la que se puede ejercer en una junta de vecinos.

La idea de poder generar un cambio en Chile me emocionaba, por eso quería hacerlo con mi verdadero nombre, Zev Tello. Este país tiene que incluirnos a todos, sin importar quiénes seamos.

Al empezar todo este proceso, hice el cambio de nombre para poder hacer campaña como Zev Tello. Me explicaron cómo era el tema, cómo se modificaba el nombre en el sistema y que se demoraba dos meses. Durante ese tiempo yo estuve esperando con mucha ansiedad, porque hacer todo esto fue un atao' de unos cuatro meses, entre que iba y no me daban número o que no había hora.

La verdad es que fue super tardío el proceso de hacer el cambio de nombre, pero quedé con la tranquilidad de que eso iba a funcionar, de que iba a poder hacer campaña como Zev sin ningún atao'. Yo ya estaba seguro de que iba a estar ahí mi nombre social y que pasaba a ser legal, en la papeleta.

En medio de todo lo que pasó con el Servel, el mismo domingo 16 me di cuenta de otro cagazo, pero esta vez de un medio de comunicación.

No puedo creer que la gente sea tan incompetente, lo que hizo Meganoticias fue un robo de identidad, porque en el conteo en línea no solo pusieron Catalina Tello,  sino que además estaba la fotografía de alguien que hasta el día de hoy no sabemos quién es, y probablemente esa persona tampoco sepa que su imagen fue utilizada.

También estoy viendo el tema de la denuncia contra ellos, pero claramente mi prioridad es lo que pasó con el Servel.

"Puedo fallarle al mundo, pero nunca me permitiría fallarme a mí mismo"

Capítulo I: Atrapado .......................... 4 <a href="bookcreator://page/I92QHdnwSVCNWVfUIzD3sw/left">Leer</a>

Capítulo II: Justicia ......................... 13 <a href="bookcreator://page/nxsfxMLaRGeWsGRLEnV0dA/right">Leer</a>

Capítulo III: La Lucha ..................... 20 <a href="bookcreator://page/kRcCL1RpRpyMprKS8hP3CA/left">Leer</a>

Capítulo IV: Persistir ....................... 28 <a href="bookcreator://page/jTWxm_IQSaux5flXGPOFtQ/left">Leer</a>

Ahora que Chile debate sobre una nueva Carta Magna, creo que es importante contarles cómo terminé siendo tan partícipe en la política. Ha sido un largo recorrido de descubrimiento y lucha contra una sociedad que muchas veces es nefasta, especialmente con aquellos que consideran diferentes. Esta es la historia de cómo me he constituido yo como persona, y cómo he enfrentado ciertos obstáculos, sobre todo cuando se trata de mi identidad.

El empezar a buscar personas que se parecieran a nuestros ideales y que tuvieran, de cierta forma, nuestra misma situación para poder llenar cupos, era el gran desafío. Tener todos los cupos para que no fuera un problema el priorizar el número de patrocinios y votantes.

Cuando comencé a plantearme el tirarme para constituyente, yo con mi grupo de compañeros estábamos pensando en hacer una lista por nuestra parte, porque nosotros no sabíamos sobre La Lista del Pueblo.

Fue en esa travesía cuando nos encontramos con La Lista del Pueblo, y fue como un encuentro mutuo porque ellos estaban buscando gente como yo. Una coincidencia que terminó siendo muy gratificante para mí, que desde ahí me uní a esa lista por el distrito 17.

Se hacían reuniones tipo distrital y una asamblea nacional, dos a tres veces por semana. Así concordábamos lo que iba pasando, también debatíamos sobre cómo nos íbamos desenvolviendo como lista entre medio de poderes políticos mucho más potentes que nosotros.

Siempre veía al psicólogo del colegio, éramos bien amigos. A los 14 años me preguntó si era lesbiana o bisexual, pero sabía que no era lesbiana aunque me gustaban las mujeres, porque yo no me sentía como una. Ahí fue cuando el psicólogo mencionó una palabra que nunca había escuchado... transgénero.

A pesar de mi historia personal y lo dura que puede sonar, desde muy chico me interesé en la ayuda ciudadana y en el activismo. Esto inspirado por mis abuelos y tíos, pues estos últimos fueron detenidos desaparecidos y torturados en dictadura.

No salí electo, pero igual la lista quedó y va a ser parte de la redacción de la nueva Constitución, así que igual estoy feliz porque confío en que un futuro Chile será distinto.

Yo creo que el primer paso para que realmente haya un cambio considerable, es que se tiene que modificar el sistema. Ahora tenemos la oportunidad de hacerlo, de poder ligarnos legalmente a una Constitución que garantice los derechos fundamentales y, en especial, el derecho a la identidad, encuentro que eso es súper súper relevante.

En la Constitución tienen que estar presentes las minorías sexuales, tiene que existir el derecho a la infancia, a la identidad y a la sexualidad.

Me he dado cuenta, en instancias con personas que también están luchando por los mismos ideales que yo, que esto es más profundo que un cambio constitucional, tiene que existir un cambio legal y, sobre todo, tiene que haber un cambio social para que todo esto sea integral.

Después de dar los resultados, o sea el día lunes en la tarde, yo estaba saltando en una pata porque me fue bien, a pesar de ciertos problemas con Servel. A todos en el distrito 17 nos fue super bien, y eso sirvió para levantarnos en el sistema de arrastre, a nosotros nos favoreció caleta porque pudimos no haber sacado ningún convencional, pero sacamos a la Elsa Labraña.

La Elsa no fue la única que salió de la lista, o sea nosotros encabezamos un gran porcentaje de personas que llegaron a la convención por parte de La Lista del Pueblo. Eso no es solo una pega distrital, es toda una pega nacional, nos tenemos que ir informando de lo que pasa en otros distritos, de lo que sucede a nivel país, etc.

Nosotros no queremos figurar, queremos que nuestros ideales lo hagan y lleguen a una próxima Carta Magna. Esto no era como una lucha de ego, y eso es algo que me encanta de La Lista del Pueblo, el solo hecho de que uno de nosotros llegara para el resto era darnos por pagados.

La pandemia afectó la campaña significativamente, porque aunque pareciera que hacer campaña por redes sociales es más fácil, la verdad es que no. Nosotros como personas comunes no sabíamos bien como funcionaba todo esto de las redes sociales donde todo es a base de algoritmos, pero al estar en fase 1 y darnos cuenta de que no había otra opción, tuvimos que ir aprendiendo.

Al inicio nos afectó mucho esa situación, pero gracias al comité ejecutivo, o sea gracias al Chancho de Guerra y al Mauro, que siempre nos apoyaron a sacar contenido y hacer los videos que salían a nivel nacional, después las redes sociales comenzaron a favorecernos.

El día en que supe que iban a moverse los días de votación me sentí más tranquilo, creo que era la ansiedad de que era muy pronto y que era abril, la verdad es que estaba medio hiperventilado en ese momento.

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