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By Sierra Pérez

by CSUP Spanish

Pages 2 and 3 of 21

Por Sierra Pérez
La decisión de Alicia Verde
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Había una vez una chica valiente llamada Alicia Verde. Ella estaba en el camino a ver a su mejor amiga María Sia, cuando decidió tomar un atajo a través de Woodland Park.

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No pasó mucho tiempo antes de que Alicia se perdiera. Miró a su alrededor, pero todo lo que podía ver eran árboles. Nerviosamente sintió en su bolsa para buscar su juguete favorito, el señor plátano, pero el señor plátano no se encontraba en ninguna parte! Alicia comenzó a entrar en pánico. Ella estaba segura de que había empacado al señor plátano. Para empeorar todo, empezaba a sentir hambre.
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Inesperadamente, vio a un cerdo peludo vestido con una chaqueta amarilla desapareciendo en los árboles.

"Qué raro!", Pensó Alicia.

Decidió seguir al cerdo vestido. Tal vez podría decirle la salida del bosque.
Eventualmente, Alicia llegó a un claro. En el claro habían dos casas, una hecha de zanahorias y otra hecha de paletas.

Alicia podía sentir su gruñido de barriga. Mirar las casas no hizo nada para ayudar con su hambre.
"Hola!", llamó. "¿Hay alguien allí?"

Nadie respondió.
Alicia miró el techo de la casa más cercana y se preguntó si sería grosero comer la chimenea de otra persona. Obviamente sería descortés comerse una casa entera, pero tal vez estaría bien mordisquear en un momento de necesidad.
Un cacareo se rompió por el aire, dando a Alicia un susto. Una bruja saltó al espacio frente a las casas. ¡Llevaba una jaula, y en esa jaula estaba el señor plátano!
"Señor plátano!", Gritó Alicia. Se volvió hacia la bruja. "Ese es mi juguete!"

La bruja sonrió una sonrisa malvada.

"Devuélveme el plátano!", exclamó Alicia.

"Nunca!", Dijo la bruja.
"¡Al menos deja salir al señor plátano de esa jaula!"

Antes de que pudiera responder, el cerdo peludo de la chaqueta amarilla se precipitó desde el otro lado del claro.

"Hola Cerdito Grandito", dijo la bruja.
"Buenos días" El cerdo se dio cuenta del señor plátano. "¿Quién es este?"
"Es el señor plátano", explicó la bruja.
"Oh! El señor plátano se vería encantador en mi casa. ¡Dámelo!", exigió.
La bruja negó con la cabeza. "El señor plátano se queda conmigo."
"Um... Discúlpeme..." Alicia interrumpió. "El señor plátano vive conmigo! ¡Y no en una jaula!"

Cerdito Grandito la ignoró. "¿Qué tal un comercio?", Preguntó la bruja.
La bruja pensó por un momento, y luego dijo: "Me gusta entretenerme. Lo liberaré a cualquiera que pueda comer toda una puerta principal"

Cerdito Grandito miró la casa hecha de paletas y dijo: "No hay problema, podría comer una casa entera hecha de paletas si quisiera".

"No hay necesidad de presumir", dijo la bruja. Sólo come una puerta principal y te dejaré tener al señor plátano."
Alicia observó, sintiéndose muy preocupada. No quería que la bruja le diera la banana al Cerdito Grandito. Al señor plátano no le gustaría vivir con un cerdo peludo lejos de su casa y todos sus otros juguetes.
Cerdito Grandito se puso el babero y retiró un cuchillo y un tenedor de su bolsillo.
"Me comeré toda esta casa", dijo Cerdito Grandito. "¡Sólo mira!"
Cerdito Grandito sacó una esquina de la puerta principal de la casa hecha de paletas. La tragó sonriendo, y volvió por más.
Y más.
Y más.
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