Amelia aprende a cocinar

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Amelia estaba muy decepcionada de sí misma. No sabía cómo le iba a decir a su mamá que tenía miedo de aprender cómo cocinar. Ella sabía que le iba a tener que confesar a su mamá pero tenía que encontrar el día perfecto para decirle.

Al preguntarle a su mamá qué necesitaba saber de la cocina. Su mamá le dijo a Amelia, "Hija ven, deja te enseño cómo cocinar lo más básico." En ese momento Amelia sé quedó callada y se dio cuenta que tenía miedo de aprender cómo cocinar. Amelia le contestó a su mamá "No gracias mamá mejor otro día".  Siguieron platicando. Amelia siguió observando cómo cocinaba su mamá.

Un día Amelia llegó de la escuela. Al entrar por la puerta de su casa le dio un olor a comida. Pensó, "Ay qué rico huele. Mi mamá de seguro está haciendo un cena bien deliciosa." Procedió a abrir la puerta y ahí cocinando con tanto amor y felicidad estaba su mamá. "¡Hola hija! Qué gusto verte. Siéntate aquí conmigo para platicar." Amelia dejó sus cosas y se puso a platicar con su mamá mientras que la observaba cómo cocinaba con tanta delicadeza.

Amelia estaba tan emocionada de aprender cómo cocinar que le pidió a su mamá que le enseñara algo rápido y sencillo. Amelia y su mamá no perdieron tiempo y su mamá le empezó a enseñar cómo cocinar arroz mexicano.

Al siguiente día Amelia se levantó animada para decirle a su mamá que quería aprender cómo cocinar. Se arregló y bajó a la cocina para preguntarle a su mamá lo más importante sobre la cocina.

Acabaron de cenar y Amelia se fue a su cuarto pensando en el libro de recetas de su mamá. "Yo quiero poder cocinar como mi mamá un día. Yo se que voy a poder un día muy cercano."

Varias semanas han pasado y Amelia y su mamá han añadido nuevas recetas. Amelia les tiene un mensaje, "Nunca crean que no pueden cocinar. La cocina es increíble y se aprende con mucha paciencia y amor. ¡Y los más importante es que guarden sus recetas de personas especiales en su vida. Y esto se llama un libro de recetas!"

Amelia y su mamá se sientan a comer. "MMM que deliciosa te quedó la comida que cocinaste mamá. Tu comida siempre está bien rica". Su mamá le responde, "Gracias hija. Me da gusto que te guste." Amelia se quedó pensando y su mamá le pregunta, "¿Amelia qué estás pensando?" Amelia le responde, "¿Mamá ese libro que siempre usas cuando cocinas, qué es?" Su mamá le responde, "Ahhh mira hija ese libro es el que me ayuda a cocinar estas deliciosas comidas todo los días."

Después de media hora Amelia por fin cocinó el arroz mexicano. Amelia estaba tan feliz que gritó, "¡MAMÁ ACABO DE COCINAR POR PRIMERA VEZ QUÉ EMOCIÓN!" Amelia y su mamá se dieron un abrazo y terminaron de cocinar para poder cenar.

Después de que terminaron de almorzar, Amelia le preguntó a su mamá, "¿Mamá qué es lo que me quieres regalar?" Ella le contestó, "Hija ya has crecido y tienes la habilidad de cocinar y aprender nuevas recetas y te quiero regalar el libro de recetas. Este libro ha pasado por muchas generaciones. Tiene recetas de tu bisabuela, abuela, y ahora yo he añadido nuevas recetas. Ahora quiero que tú tengas este libro de recetas y agregues nuevas recetas." Amelia empezó a llorar porque sentía tanta emoción.

Amelia hizo un pacto con su mamá de que desde ese momento iban a cocinar juntas usando el libro de recetas y le iban a añadir nuevas recetas juntas.

Al siguiente día Amelia se levantó muy temprano y se puso a cocinar almuerzo. Cuando su mamá bajó a la cocina Amelia tenía listo el almuerzo. Su mamá le dijo, "Hija estoy tan orgullosa de ti y tengo algo muy especial que darte. Hablemos cuando acabemos de almorzar."

Al siguiente día Amelia estaba tan emocionada que empezó a leer todas las recetas y se quedó impresionada de cuántas recetas tradicionales tenía. Fue a buscar a su mamá y le dijo, "Gracias por darme este libro de recetas y gracias por enseñarme cómo cocinar. Estoy muy agradecida y muy feliz de tener este libro."

La mamá de Amelia le empezó a decir qué agarrar para preparar el arroz mexicano. Amelia empezó a agarrar un ritmo en la cocina y ella estaba tan contenta. Empezó a añadir todos los ingredientes mientras su mamá le decía cómo hacer cada paso.

Al siguiente día Amelia le dijo a su mamá, "¿Puedo hablar con usted?" Su mamá le contestó, "Claro hija. ¿qué pasa?" Amelia le dijo, "Quiero que no te enojes conmigo o estés decepcionada de mí pero tengo miedo de aprender a cocinar." La mamá le dijo, "Hija eso no es algo que me haría enojar o me decepcionaría. Yo te voy a enseñar cómo cocinar y todo a su tiempo." Amelia se alegró tanto que se sintió tan contenta que podría aprender cómo cocinar.

SOBRE LA AUTORA

Janet es una estudiante en Colorado State University- Pueblo en Pueblo, Colorado. Está estudiando para tener su licencia para ser maestra de kinder a quinto grado. Le encanta pasar tiempo con su familia y explorar la naturaleza. La idea de este libro era para que los niños se inspiren a aprender sobre la comida, cultura, recetas y lo más importante, identidad.

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