Loro la planta

Todas las plantas se pusieron al lado de Loro y tomaron un trago menos de agua para que le quedara más a Loro.

Las plantas altas se hicieron un poco para el lado, hasta el tomate, aunque estaba preocupado por sus tomates.

Solo con un poco de cambio y pasar un poco más de comida para esos que la necesitan más en el mundo puede ser posible hacer un cambio más grande del que la gente piensa. Si se logró en un jardín se puede lograr en el mundo….&nbsp;

El elote les dio la idea a las demás y apoyó a Loro, pero las demás plantas se pusieron a discutir y le decían que por qué apoyaba a Loro si no había necesidad de flores en ese jardín porque los humanos no podían beneficiarse con sus flores.&nbsp;

El elote les dijo que le dieran una oportunidad y seria beneficioso para todos en el jardín y para los humanos también.&nbsp;

Las plantas pequeñas seguían a las plantas grandes en sus decisiones porque eran las que tenían la voz en el jardín. El frijol cambió su decisión y apoyó a Loro y al elote.&nbsp;

El jardín estaba lleno de plantas que daban frutas y vegetales. Había plantas de todos los colores y tamaños.&nbsp;

La dueña de todas las plantas siempre les echaba agua para que no se sequen y tengan energía para poder producir de las mejores frutas y vegetales.&nbsp;

Hasta que un día Loro se animó de decirles a los demás que le dejen más agua y si se podían hacer un poco para el lado para que tome más sol para su salud.&nbsp;

Las demás plantas se rieron y no le hicieron caso, pero el que se puso un poco pensativo fue el elote.

Las plantas a las que siempre les cubría más el sol eran un elote, tomate, y una mata grande de frijoles.

Loro era una planta que era diferente porque era una flor tipo rosa con un color naranjada.&nbsp;

El elote pensó y se dio cuenta que si todos se repartían mejor los alimentos, cada uno podía producir más o menos igual.

Al fin todas las plantas le decían "Loro de oro", porque le dieron la oportunidad y ahora tenía unas flores que nadie había visto antes en este mundo.&nbsp;

El tomate empezó a llorar porque pensó que iba a perder sus tomates redondos, rojos, y muy brillosos&nbsp;

En un verano muy caliente había una planta que era más diferente de todas las otras plantas en un jardín. Se llamaba Loro y producía puras flores.

Pasaron dos semanas y todas las plantas empezaron a ver que todo seguía igual para todas.&nbsp;

Un poco de tiempo después las plantas todas siguieron con los mismos resultados menos Loro. Estaba más grande, más brillante con más flores con un color naranjado con oro.&nbsp;

<strong>SOBRE EL AUTOR<span></span></strong>

Gerardo Díaz vive en Pueblo Colorado donde asiste a la Universidad de Colorado en Pueblo. Es estudiante de Sociología/ Criminología y Español. También juega el deporte de futbol americano. La idea de este libro viene de su conocimiento de la agricultura y su deseo de que la audiencia entienda que con un cambio chico se puede ayudar a más gente, y más si es con la comida porque hay para repartir.&nbsp;

Todos los días se enojaba un poco más y más Loro, pero no sabía en qué manera decirles a los demás que si le dejaban poquita más agua

Entre todas las plantas se repartían del agua porque siempre tenían un sistema para ayudarse uno a otro.&nbsp;

Pero siempre Loro era la ultima planta a la que le llegaba el agua así que era la última en comer y también no tomaba mucho sol porque estaba un poco mas chica que las otras plantas.

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