CUENTOS
DE MISTERIO
Y TERROR
MAESTRA ANAHÍ ALVAREZ
ÍNDICE
3
4
7
9
11
12
17
12
17
El presente libro digital interactivo contiene historias aterradoras y misteriosas, cuya invención y redacción fue realizada por los alumnos del grupo de sexto grado, sección "A" de la Escuela Primaria General Victoriano Cepeda, de la ciudad de Saltillo, Coahuila, como producto final de la Práctica Social del Lenguaje 5: "Escribir cuentos de misterio y de terror para su publicación"
Maestra: Anahí Alvarez
Maestra: Anahí Alvarez
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inesperadaLoading...
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Perdí a toda mi familia. Cuando íbamos a visitar a mis tías en California por su cumpleaños. Cuando de repente mi papá perdió los frenos y perdimos el control. De un momento a otro nos encontrábamos en el fondo de un barranco. Cuando recuperé la conciencia pude notar que mi familia aun no reaccionaba así que decidí que con las pocas fuerzas que me quedaban salir del coche a pedir ayuda, dure un rato parada ahí en medio de la carretera fría y solitaria con la esperanza de que alguien se parada para ayudar a mi familia y a mí pero eso no ocurrió, hasta que vi que una ambulancia se acercaba al lugar para trasladar a mi familia a algún hospital. Me subí a la ambulancia con mis papás para que los trasladaran al hospital con la esperanza de que se recuperaran y seguir viviendo como siempre lo hemos hecho más sin embargo murieron en el camino sentí que una gran tristeza que me invadió por completo.Loading...
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Después de ir al funeral de mis padres me sentí con una gran tristeza así que decidí ir a la casa de mis padres en donde empezaron a suceder cosas extrañas. Todo el tiempo me sentía mirada por alguien, apagaban y prendían la luz y mi mascota me ladraba cosa que nunca había pasado ya que era muy tranquilo y mansito, pero no me preocupé ya que no era muy asustadiza y simplemente lo ignoré.
Un día mientras estaba limpiando mi casa empecé a escuchar voces de personas, seguí el sonido de las voces y me guiaron a la cocina, no le di mucha importancia pero justamente cuando iba a dar la vuelta logré ver la silueta de una mujer con un niño
pequeño, volví a voltear pero esta vez no había nada pero cuando me di la vuelta esta vez sí vi con claridad las dos siluetas que había visto era una mujer hermosa de pelo rubio alta ojos azules y su niño de pelo café claro ojos marrones y piel semi rosada que estaban jugando alegremente, corrí rápidamente a mi habitación a esconderme ya que esta vez en verdad si me asusté.
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Hoy era un día hermoso así que decidí salir en bicicleta, pero lo malo es que estaba en el ático y yo sola no iba a poder bajarla, pero tampoco tenía a alguien que me ayudara, pero si o si iba a salir ya que no me iba a perder este día. En el momento que subí, ví demasiadas cajas, por curiosidad empecé a revisar caja por caja en algunas encontré regalos de mis padres y juguetes viejos, esto me dio nostalgia y empecé a llorar hasta que me encontré una caja que decía documentos en el momento que la abrí vi que había documentos del trabajo de mi papá y otras cosas pero lo que me llamó la atención fue que estaban las actas de defunción de mis padres y ¡también las mías! no podía creer lo que estaba viendo... entonces comprendí que yo era el espíritu y que los “fantasmas“ que había visto la noche pasada no eran fantasmas si no que ellos eran los humanos y que yo era el fantasma en esa casa.
Dana
LA NIÑA DE LA VENTANA
Había una vez una maestra llamada Valentina. Era la nueva maestra de 5to grado. En su primer día llegó muy temprano, como a las 7:25 am.
La escuela estaba sola, oscura, tenía la puerta abierta. De inmediato le habló al conserje, pero al parecer no estaba. Fue al salón para dejar sus cosas, cuando de la nada vio por la ventana a una niña con el uniforme de la escuela, además con el cabello largo y negro. Estaba muy pálida, su mirada fija hacia la maestra como si le quisiera hacer algo malo con una cara aterradora. Rápido se salió para verla del otro lado, justo cuando vio atrás, se quedó fría porque no estaba.
La maestra seguía en shock por lo sucedido.
-Maestra, ¿está bien? Se ve muy pálida. -Preguntó el conserje.
La maestra le dijo lo que ocurría, en eso llegó la directora y el conserje le hablo de lo que pasaba con la maestra.
-Directora a la maestra Valentina se le apareció la niña.-Le comentó el conserje.
-¡Qué! No…no puede ser voy hablar con ella.- Dijo la directora.
Para estar más segura le volvió hacer la misma pregunta.
-¿Segura que viste a la niña?-Le preguntó la directora.
-Sí-Dijo
la maestra Valentina.
-Okey Valentina, me podrías describir a la niña por favor.-
La escuela estaba sola, oscura, tenía la puerta abierta. De inmediato le habló al conserje, pero al parecer no estaba. Fue al salón para dejar sus cosas, cuando de la nada vio por la ventana a una niña con el uniforme de la escuela, además con el cabello largo y negro. Estaba muy pálida, su mirada fija hacia la maestra como si le quisiera hacer algo malo con una cara aterradora. Rápido se salió para verla del otro lado, justo cuando vio atrás, se quedó fría porque no estaba.
La maestra seguía en shock por lo sucedido.
-Maestra, ¿está bien? Se ve muy pálida. -Preguntó el conserje.
La maestra le dijo lo que ocurría, en eso llegó la directora y el conserje le hablo de lo que pasaba con la maestra.
-Directora a la maestra Valentina se le apareció la niña.-Le comentó el conserje.
-¡Qué! No…no puede ser voy hablar con ella.- Dijo la directora.
Para estar más segura le volvió hacer la misma pregunta.
-¿Segura que viste a la niña?-Le preguntó la directora.
-Sí-Dijo
la maestra Valentina.
-Okey Valentina, me podrías describir a la niña por favor.-
-Sí, bueno para empezar la niña tenía el uniforme de la escuela,
el cabello largo y negro, también estaba pálida con una mirada aterradora.-
Entonces la directora sacó un libro en donde habría fotos de
los alumnos. Le mostró la niña que había visto la maestra.
-¡Sí!, es ella.-Dijo la maestra.
La directora se quedó fría y con la piel de gallina.
-¡No puede ser! Esa…esa niña ¡está muerta! - Dijo la directora.
La maestra no lo podía creer.
-Entonces esa niña está muerta, y murió aquí en la escuela.-
La directora asintió.
Desde entonces la maestra Valentina a tenido un trauma por
aquel día aterrador.
el cabello largo y negro, también estaba pálida con una mirada aterradora.-
Entonces la directora sacó un libro en donde habría fotos de
los alumnos. Le mostró la niña que había visto la maestra.
-¡Sí!, es ella.-Dijo la maestra.
La directora se quedó fría y con la piel de gallina.
-¡No puede ser! Esa…esa niña ¡está muerta! - Dijo la directora.
La maestra no lo podía creer.
-Entonces esa niña está muerta, y murió aquí en la escuela.-
La directora asintió.
Desde entonces la maestra Valentina a tenido un trauma por
aquel día aterrador.
Zuria
César
César
LA CASA DE LA MUERTE
Todo empezó un día, cuando un señor llamado Rodolfo decidió comprar una casa nueva, al ver varias casas le interesó una ya que se ajustaba a su presupuesto, miro que había un número y decidió llamar. – ¡Hola!, buenas tardes soy Rodolfo y hablo por la casa en venta. - Dijo al teléfono y contesto una señora. –Buenas tardes, un gusto, me llamo Lucía, soy la dueña de la casa. - Platicaron un rato y quedaron de verse en un lugar para la entrega de pago y llaves.
Al día siguiente Rodolfo se dirigió a la dirección donde quedaron de verse él y Lucía, al llegar le pareció extraño que fuera un asilo, pero sin embargo no le tomó importancia y preguntó por Lucía. –Buenos días, vengo con Lucía. - Le dijo a la señorita que se encontraba en la entrada y ella le respondió. – ¡Claro!, venga por acá.
- Llegaron a la habitación de Lucía, Rodolfo entró y al verla conversaron un rato y Rodolfo le dio el pago y ella las llaves de la casa, pero antes de que Rodolfo se fuera el preguntó. - ¿Por qué vive aquí? - Y ella respondió. –Hace 10 años mi hija falleció y desde que pasó eso no volví a tener compañía, y decidí mejor estar aquí. - - ¡Oh! Lo siento mucho. - luego de eso Rodolfo se fue a la casa nueva a dejar unas cosas ahí.
Al día siguiente Rodolfo se dirigió a la dirección donde quedaron de verse él y Lucía, al llegar le pareció extraño que fuera un asilo, pero sin embargo no le tomó importancia y preguntó por Lucía. –Buenos días, vengo con Lucía. - Le dijo a la señorita que se encontraba en la entrada y ella le respondió. – ¡Claro!, venga por acá.
- Llegaron a la habitación de Lucía, Rodolfo entró y al verla conversaron un rato y Rodolfo le dio el pago y ella las llaves de la casa, pero antes de que Rodolfo se fuera el preguntó. - ¿Por qué vive aquí? - Y ella respondió. –Hace 10 años mi hija falleció y desde que pasó eso no volví a tener compañía, y decidí mejor estar aquí. - - ¡Oh! Lo siento mucho. - luego de eso Rodolfo se fue a la casa nueva a dejar unas cosas ahí.
Jessica
David
David
Después de varios días Rodolfo pudo trasladar sus cosas a su nueva casa para por fin poder vivir ahí, paso el tiempo y todo iba bien hasta que un día mientras Rodolfo cenaba se fue a luz, le pareció extraño pues en las casas de sus vecinos si había luz, empezó a escuchar pasos y una linda canción que parecía que la cantaba una joven con una voz hermosa. – ¿Hay alguien ahí? - digo Rodolfo aterrorizado y con la voz temblorosa, rápidamente prendió la lámpara de su celular y al hacerlo vio la sombra de una joven chica, de pelo largo y negro y Rodolfo se apresuró a decir. - ¿¡Quién eres y que haces en mi casa!?- luego de que Rodolfo dijo eso
volvió la luz, pero en el mismo momento que volvió sintió que alguien le rosaba el hombro, se fue a la cama sin terminar su cena y esa noche no pudo dormir nada. Pasaron los días y Rodolfo no podía dormir se sentía con miedo y como si lo estuvieran mirando, la casa ya no le parecía agradable.
Un día decidió ir con Lucía pues de verdad no se sentía nada cómodo en la casa, llego con ella y le platicó lo sucedido, mientras lo contaba a Lucía se le cayó el té y se quedó sorprendida. - ¿Qué pasa? - Preguntó Rodolfo y ella dijo. –Desde que murió mi hija me empezaron a pasar cosas similares, le conté a la gente, pero nadie me creyó, me decían loca y por eso también preferí estar aquí en el asilo porque aparte de estar sola tenía miedo, demasiado miedo que no podía ni dormir, preferí vender la casa pues pensé que eso solo me pasaría a mí por ser su mamá, pero veo que me equivoqué completamente. - Se quedó callada por unos segundos,
pero volvió a decir. – ¡Tienes que irte de la casa ya! - Exclamó asustada mientras lo decía, rápidamente Rodolfo se dirigió a la casa, empacó lo más importante y se fue, pero mientras manejaba rápido tuvo un accidente y murió.
volvió la luz, pero en el mismo momento que volvió sintió que alguien le rosaba el hombro, se fue a la cama sin terminar su cena y esa noche no pudo dormir nada. Pasaron los días y Rodolfo no podía dormir se sentía con miedo y como si lo estuvieran mirando, la casa ya no le parecía agradable.
Un día decidió ir con Lucía pues de verdad no se sentía nada cómodo en la casa, llego con ella y le platicó lo sucedido, mientras lo contaba a Lucía se le cayó el té y se quedó sorprendida. - ¿Qué pasa? - Preguntó Rodolfo y ella dijo. –Desde que murió mi hija me empezaron a pasar cosas similares, le conté a la gente, pero nadie me creyó, me decían loca y por eso también preferí estar aquí en el asilo porque aparte de estar sola tenía miedo, demasiado miedo que no podía ni dormir, preferí vender la casa pues pensé que eso solo me pasaría a mí por ser su mamá, pero veo que me equivoqué completamente. - Se quedó callada por unos segundos,
pero volvió a decir. – ¡Tienes que irte de la casa ya! - Exclamó asustada mientras lo decía, rápidamente Rodolfo se dirigió a la casa, empacó lo más importante y se fue, pero mientras manejaba rápido tuvo un accidente y murió.