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“MARTÍN DE PASEO”
Una hermosa mañana, Martín, un niño de 10 años y su mamá, salieron de paseo en su auto.
Su mamá le pidió que se ponga el cinturón, pero él con mala cara, le dijo que no.
Ella arrancó y empezó a comportarse a manera extraña, pasó el semáforo en rojo, no respetó el paso a un peatón, tocaba bocina sin sentido y en lugares donde había menos tráfico aceleró. Mirando al espejo retrovisor, vio la cara de su hijo, entonces frenó y le preguntó a Martín qué les pasaba.
Él con los ojos llorosos, le dijo que estaba mal lo que ella hacía, que era imprudente.
Su mamá lo miró y le dijo:
- Que vos, Martín, no te pongas el cinturón, también es un acto irresponsable y peligroso. Todos tenemos que seguir las normas de tránsito, para que no sea un caos.
La mamá de Martín, había hecho todo eso con cuidado, sin lastimar a nadie, solo buscaba que se dé cuenta que estaba mal su accionar y tome conciencia del mismo.
Desde ese día, Martín aprendió una gran lección, y el cinturón de seguridad jamás se negó a usar.
Su mamá le pidió que se ponga el cinturón, pero él con mala cara, le dijo que no.
Ella arrancó y empezó a comportarse a manera extraña, pasó el semáforo en rojo, no respetó el paso a un peatón, tocaba bocina sin sentido y en lugares donde había menos tráfico aceleró. Mirando al espejo retrovisor, vio la cara de su hijo, entonces frenó y le preguntó a Martín qué les pasaba.
Él con los ojos llorosos, le dijo que estaba mal lo que ella hacía, que era imprudente.
Su mamá lo miró y le dijo:
- Que vos, Martín, no te pongas el cinturón, también es un acto irresponsable y peligroso. Todos tenemos que seguir las normas de tránsito, para que no sea un caos.
La mamá de Martín, había hecho todo eso con cuidado, sin lastimar a nadie, solo buscaba que se dé cuenta que estaba mal su accionar y tome conciencia del mismo.
Desde ese día, Martín aprendió una gran lección, y el cinturón de seguridad jamás se negó a usar.
Seudónimo: ANDRÉS