La versión del lobo en la caperucita roja

Alumna, Nathaly Condori

Hola amigos! Hoy les traigo un cuento que pocos lo conocen, es de mi amigo el lobo.

Ya sé, ustedes creen que él es muy malo, pero realmente no saben lo que paso aquella vez con la caperucita roja.

En una cabaña muy lejana, vivía caperucita roja con su mamá. Aquella mañana le ordenó ir a dejarle las medicinas a su abuelita que vivía por el bosque.

Caperucita era una niña poco obediente y a veces solía desviarse del camino, aunque su madre le ordenaba ir directo a casa de la abuela y no quedarse por el bosque.

Caperucita roja al ver las hermosas flores, se acercó para arrancarlas, a pesar que su madre le decía que tenían vida. Por otro lado, el lobo que de muy lejos la veía, decidió acercarse.

Saludo muy amablemente a caperucita roja, y se presento como el cuidador del bosque, pues él era quien estaba pendiente de que todo marchara bien.

Caperucita roja al verlo saltó de un susto, soltando su canasta. El lobo muy amable, le ayudó a recogerlo para que caperucita sepa que él no es malo, sino que todo lo contrario. Se quedaron conversando por un largo tiempo, hasta que caperucita se acordó del encargo de su mamá.

Ella tenía que llevar los medicamentos a su abuela, y el lobo para ayudarla le dijo los 2 caminos, uno muy largo y el otro corto. Caperucita al escuchar ambos caminos, escogió el más largo para seguir jugando y arrancando flores. El lobo al ver las intenciones, adivinen que hizo.

El lobo muy astuto, fue por el camino corto en busca de alguna lección para caperucita, porque se dio cuenta que ella no queria respetar la vida de las plantas y los animales. Asi que decidió hablar con la abuela.

El lobo tocó la puerta, le contó a la abuela lo sucedido, y juntos decidieron armar un plan para que caperucita aprendiera la lección. La abuela decidió esconderse en el baño mientras el lobo alistaba todo.

El lobo comenzó a ponerse la ropa de la abuela antes de que llegara caperucita roja, después de esto la abuelita y el lobo conversarían con ella para que obedezca a su mamá y pueda respetar a las flores.

Después de un largo tiempo, Caperucita llegó a casa de la abuela, al tocar se dio cuenta que la puerta estaba abierta, y las luces apagadas, y a pesar de eso decidió entrar para ver que es lo que pasaba.

Caperucita al entrar a la casa, vio a su abuela muy rara, y comenzó a preguntarle porque tenía las orejas muy grandes, los ojos muy grandes, la boca demasiado grande, que no se había peinado y que no estaba oliendo muy bien. El lobo se sintió muy mal, estaba muy triste y un poco molesto porque se sentía juzgado.

El lobo no pudo más y saltó de un brinco. La caperucita roja comenzó a gritar pidiendo ayuda, pero el lobo lo único que queria era que caperucita dejará de tratarlo tan mal.

Un cazador que se encontraba cerca, escuchó los gritos de caperucita roja y corrió para ayudarla, pues pensaba que ella estaba en peligro. Aunque el lobo solo había dado un brinco de la cama a la sala.

Al llegar el cazador no preguntó que había pasado, solo trato de amarrar al lobo para llevarlo muy lejos y castigarlo. El lobo trató de defenderse y contarle la verdad al cazador, pero él no le creyó.

Caperucita roja no le contó al cazador que el lobo no le habia lastimado, dejó que el cazador se llevara amarrado al lobo para castigarlo. Aunque caperucita roja se sentía culpable se sentó en el piso para pensar.