Cuento para Niños de 7 años. Con  multimodalidad (texto, imagen, audio, video, gráfico, y  dibujos)

CUENTO

-Me voy, lo mejor es no seguir jugando con ustedes, han causado mil estragos. Miren como he dejado mi lana, tendré que cepillarla de nuevo- -Que vienes a hablar de lana, mira nada más mis hermosas alas. Todo por andar jugando con ese balón, no es juego para un ave como yo- Que extrañas actitudes con las que han salido de la cueva, no parecen ser los mismos que entraron. Viene una hermosa coneja saltando y los oye discutiendo.

Entre risas y grandes historias, Chorlito y Penfold habían llegado a su destino. Se han encontrado con Murphy, quien es nuevo en la villa. ¡Ohhh un momento! Penfold y Murphy se conocen de hace varios años, habían realizado algunos viajes juntos a lugares fantásticos y asombrosos. Penfold le presenta a Chorlito a su viejo amigo Murphy y cruzan algunas palabras. A Murphy le encanta el futbol, todo el tiempo lo pasa pateando y jugando con lo ve. Se dirigen juntos al manantial para bañarse y disfrutar de la hermosa vista y del agua cristalina que hay en la montaña, después de un rato Murphy los invita a jugar con su balón de futbol.

¡La pelota se ha ido hasta el fondo de una cueva muy oscura! Los chicos no se sienten muy seguros de ir a buscar el balón y comienzan una pequeña discusión sobre quien deberá entrar primero. Luego de un rato, logran tomar un poco de valor, Penfold se decide a ir adelante, detrás ira Murphy y por último Chorlito.

Como no veían, tuvieron que valerse de sus manos y patas, tocando todo lo que encontraban. Se ha escuchado un ruido y un fuerte olor ha salido de la cueva, ¡algo extraño ha pasado! Finalmente encontraron el balón.

-¿Qué les ha pasado?, ¡están todos de color azul!. Esta simpática coneja, era muy curiosa, por ello a diario, iba a la montaña a entretenerse creando diferentes experimentos. Su más reciente trabajo era ese; con el cual había dejado a los animales todos cubiertos de azul. Los había hecho volverse intolerantes por completo; algo así como una nube de color que los hizo olvidarse de la amistad que habían construido y que parte especial de esta, es el respeto y el dialogo. Ruby se quedó muy pensativa. ¡Paticas a trabajar! De un solo brinco Ruby ya estaba trabajando en sus zanahorias mágicas, que devolverían a Penfold y sus amigos a su estado original, que harían que nuevamente volviesen a ser tan amables y amistosos.

Radial orange

LAS ZANAHORIAS MAGICAS QUE LOS HICIERON AMIGOS OTRA VEZ

Para Chorlito y Penfold no es tan fácil patear la pelota, sus patas son más cortas y no tienen tanta fuerza como las de Murphy. Sin embargo, Penfold está muy emocionado, quiere patear la pelota tan fuerte como pueda. -Patearé tan fuerte el balón como nunca lo han visto en sus vidas, intentaré hacer llegar la pelota al fin de universo –

-Que alivio ver que el antídoto ha funcionado y lo mejor de todo es que estas zanahorias también les darán super poderes para realizar todas las actividades que deseen, ahora todos tendrán muchas habilidades para el futbol, para jugar en la nieve o incluso para nadar - Entraron al espesor de la montaña buscando a Chorlito. Ahí va el ave, se ha posado en una de las ramas más altas de un árbol. Los amigos saltan y corren tras él; ha regresado al manantial. Los demás animales lo ven de lejos y se distribuyen para intentar apuntar sin fallar. Ruby tiene la Zanahoria.

-¿Que les parece si jugamos futbol un rato? Es mi deporte favorito y me encantaría poderlo jugar con ustedes- -Claro que si, vamos, aunque deberás enseñarnos algunas cosas- -Creo que lo disfrutaremos mucho- Luego de encontrar un lugar plano y despejado, Murphy les enseña a patear, a atajar la pelota e incluso les muestra algunas de sus mejores jugadas.

Después de varias horas de trabajo, al fin tiene Ruby el antídoto, la dificultad será encontrar a estos amigos. Que suerte, Penfold se encuentra en su casa, no es nada difícil disparar a este amigo pingüino la zanahoria. Buscan a Murphy y Chorlito por todas partes, pero no los encuentran por ningún lado.

De repente, una oveja pasa por sus ojos a toda prisa, ahí va Murphy, corren para alcanzarlo. Se mueve con mucha fuerza y no logran apuntarle con la zanahoria. Finalmente, Ruby después de 5 zanahorias logra que el antídoto llegue hasta él.

Érase una vez un lugar muy hermoso, llamado La Villa Verde, donde reinaban la alegría, la amistad y el amor. En esta villa todos eran solidarios, ayudaban a los otros con sus deberes y trabajos.

Un día Penfold y Chorlito salieron a una de las montañas cercanas, mientras Penfold caminaba, Chorlito lo acompañaba volando.

-Que bien Penfold que se te ha ocurrido esta idea de venir a darte un baño de agua helada en el manantial- - Así es Chorlito, últimamente son días muy calurosos los que hacen en el pueblo y necesito un poco de frío- -Ya estamos muy cerca de la cima, desde aquí arriba logro verla- -Pasaremos una mañana muy agradable, encontrarás muchos árboles en los cuales posarte-

Murphy ha quedado en distraerlo tirándole algunas semillas que sabe le gustan mucho. Mientras tanto, Ruby se acerca por detrás muy silenciosamente para asegurarse de usar bien la zanahoria, pero no ve una rama que hay en el suelo y el sonido alerta a Chorlito; sin embargo, Penfold estaba dispuesto para ayudar y salta a tiempo para sujetar a Chorlito. Juntos logran que la zanahoria llegue directo hasta él y que recobre nuevamente su alegría. Todos volvieron a ser los mismos y ganaron un amigo más, la ingeniosa Ruby, con la que ahora realizan experimentos y se divierten en la montaña.